miércoles, 19 de enero de 2011

una política de tierra quemada y la opinión ciudadana

Yo hablo también con credulidad, con más voluntarismo que optimismo.pero esto se parece a una política de tieerra quemada y a veces es muy fácil dejarse manipular en la opinión ciudadana.

Una política de "tierra quemada" es aquella practicada por todo sistema de dominación en crisis, por la cual se acaba "desvalorizando el terreno que cede" : el mismo mal se devaluaría cuando pudiesen practicarlo "todos por igual" . O dicho de otra manera, cuando se puede tener acceso a un privilegio en "condiciones de igualdad" el privilegio habrá dejado de ser un "privilegio" . Lo que invita a meditar si esta prueba de test a que se va a someter todo el sistema bancario, más el español, pero también el europeo, para sanear la economía de la eurozona, y la genérica igualdad a que se somete, no será a la postre un objetivo tan inane como la "genérica" diferencia de criterios entre ellos.

La sociedad pudo pecar por credulidad, en verdad cuando creímos en este sistema político o económico. Y aunque con incertidumbre seguimos un poco abandonados a nuestras creencias.

Realmente la opinión ciudadana me parece que se queja pero no lo expresa o lo expresa mal por falta de conocimiento, que es de lo que estamos aquejados todos mayormente, y por falta de realidad, porque la realidad tiene que penetrar a través de las creencias por verdaderas que sean, pero éstas se nos ocultan o deslizan de la realidad y vivimos como olvidados en ellas, rebasados en nuestros propios límites.

Y es que el hombre está aquejado de falta de pensamiento y así ha saltado el furor de las masas, dirá María Zambrano, cuando habla de España. Y es que el saber ofrecido es inasequible, se gana inquietud con el conocimiento. Y la ignorancia tampoco resulta habitable. Y hoy día la ciencia más que poner remedio lo que ha hecho es agravar la enfermedad.


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