viernes, 14 de enero de 2011

una crítica a la metafísica desde el "tiempo" formador de la diferencia

Derrida interpreta la pregunta conductora de Heidegger por el sentido del ser como pregunta por un significado trascendental incluso para la propia metafísica. Sin embargo, Heidegger tenía al acontecimiento de la formación de la diferencia por más originario que al sentido del ser, que sólo puede abrirse (y simultáneamente ocultarse) a raíz del acontecimiento de la formación de la diferencia.

Por consiguiente, tanto en Heidegger como en Derrida, el tiempo, en tanto que potencia de la formación de la diferencia, consigue en cierto modo la victoria final frente al logos, el cual, no obstante, es capaz de enunciar esto mismo. Estamos ante una completa inversión de la idea que definieron los comienzos de la metafísica occidental en Parménides y Platón. El que en virtud del logos podamos pensar el tiempo, y enunciar y comunicar lo pensado -con pretensión de validez intersubjetiva-, ya no parece ser lo asombroso; incluso no se reflexiona sobre ello en cuanto inevitable pretensión de validez.

Ahora bien, yo creo que este programa deconstruccionista representa una aporía de la crítica de la metafísica, exactamente en la misma medida que el precedente reduccionismo ontológico de la crítica naturalista-cientificista a la metafísica. Y es digno de atención el que, en ambos casos, tanto en el reduccionismo ontológico como en el último Heidegger y en Derrida, da la impresión de que el propio intento de crítica de la metafísica termina por adquirir un carácter metafísico: finalmente, el tiempo formador de la diferencia resulta ser un candidato tan sugestivo para ocupar el lugar del origen en la metafísica qua explicación del mundo en sentido prekantiano, como el mecanismo de la naturaleza, la voluntad de Schopenhauer o la voluntad de poder de Nietzsche. Pero en todos estos planteamientos falta una reflexión estricta sobre las condiciones de posibilidad de las propias pretensiones de validez.
 
(K-O. Apel, Teoría de la verdad y ética del discurso, París, Les Éditions du Cerf, 1994).

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